Nuestros dirigentes.

Existe un hecho demostrado que dice que el tiempo da y quita razones, que sitúa  las cosas en su justo lugar y me explicó:

España gestionó  durante años la incorporación a la Unión Europea. Iniciativa esta que buscaba por su lado el respaldo final para la consolidación de la entonces incipiente democracia  nacional y a la vez estar presente en el foro de países donde nuestro país comenzaba a desarrollar la mayor parte de sus actividades económicas, a la vez que junto a estas esperaba conseguir a medio plazo el nivel de desarrollo político, social, económico, laboral, etc., que permitiera a los españoles conseguir el nivel de vida y grado de bienestar social que los países que a ella pertenecían habían alcanzado.

Esa era en líneas generales la pretensión de nuestro país cuando empezamos a formar parte de la Unión Europea en la primera mitad de los años ochenta del pasado siglo XX con el gobierno socialista de Felipe González.

Desde entonces han pasado más de veinticinco años y ocurrido muchas cosas, la mayor parte de ellas hasta 2.010 positivas. Sin embargo a partir de entonces la situación ha tomado una  marcha hacía atrás  en los objetivos alcanzados incontrolable, que hasta el presente está causando estragos en nuestro país  y otros de la U.E…

De la mano de Europa entonces dirigida  acertadamente por Delor, Koll, Mitterrand, González  y otros se avanzó considerablemente en el aspecto democrático, económico, laboral y social, reduciendo la diferencia entre los que más y menos tenían  en la línea de conseguir una mayor igualdad y justicia social.

Desde aquella etapa y más aún en los últimos años estamos viendo y sufriendo como ocurre todo lo contrario.

La Unión Europea actual poco se parece a la línea de actuación antes citada, nadando contra corriente y tratando de justificar su injustificable forma de proceder.

La señora Merkel y aquellos dirigentes que la apoyan, influenciados por el Fondo Monetario Internacional, organismo este de mucho peso político-económico, pero así mismo ampliamente desprestigiado ya que un día si y otro también se equivoca en sus predicciones y  recomendaciones, vienen argumentando  para justificar sus actuaciones que atravesamos una grave crisis y para ello han impuesto una política restrictiva  cueste lo que cueste, frente a lo que últimamente viene haciendo países como  Estados Unidos, Japón, los países emergentes y otros. A esto se une las recientes declaraciones de expertos economistas nacionales e internacionales que manifiestan que hay que  incrementar la iniciativa empresarial, creación de empleo y  consumo para revertir  la situación.

Olvidan nuestros gobernantes nacionales y europeos que los ciudadanos les hemos elegidos para que  solucionen  los problemas comunes que afectan a la sociedad, no para que los  agraven cada vez más como están haciendo.

Al mismo tiempo, ni siquiera uno de estos dirigentes viéndose incapaz de dar respuestas,tienen la vergüenza política de  presentar la dimisión.

Actualmente los gobernantes de la U.E. tienen por bandera la política neoliberal implantada por Ronald Reagan y Margaret Tacher, lo cual demuestra lo poco que aprendimos de aquella injusta forma de gobernar.

Actualmente en la U.E cada país va a lo suyo y así nos va. De sobra saben que la aireada crisis  no la  ha causado los pequeños empresarios, los autónomos, los trabajadores, los dependientes etc.  Y también que son estas las que más están sufriendo las consecuencias.

El tiempo pasa y durante los últimos años vemos como se hunden países, cierran miles de empresas, millones de trabajadores van al desempleo, las personas pierden sus viviendas, dejan de estudiar  los estudiantes al  perder ayudas y no poderse costear los estudios, emigran nuestros talentos, hay que pagar cada vez más por los medicamentos, se recorta cada vez más las ayudas a la dependencia, se aprueban nuevas leyes que recorta ampliamente los derechos laborales, los impuestos cada vez se cargan más sobre los que menos tienen, aumentan el fraude fiscal, prolifera la corrupción etc .

Ese es el panorama que tiene ante si nuestro país y otros de la U.E. y para corregirlo poco o nada hacen nuestros dirigentes.

Pienso que  así no podemos seguir ya que está demostrado que la actual línea seguida por la dirección de la U.E es errónea, agravando cada vez más los problemas que padecemos.

¿ Que podemos hacer entonces? Pues lo que asimismo está demostrado que surte efecto como son las manifestaciones de protestas, huelgas, concentraciones, reclamaciones, denuncias etc. A todo ello la clase dirigente le tiene mucho respeto. La Historia demuestra que en ocasiones los ciudadanos con su actitud reivindicativa firme y decidida han hecho posible el cambio de la situación a la que los dirigentes les habían llevado.

Para concluir recordar que el próximo año tendremos elecciones al Parlamento Europeo. Habrá por lo tanto que ser consciente de lo que está en juego a la hora de acudir a las urnas, eligiendo aquella opción/es políticas que merezca nuestra confianza y mejor defienda la justicia social, frente a los cuentos chinos y las drásticas restricciones que ahora nos imponen los actuales dirigentes europeos.

Juan Coronel Martín