Hace ya más de cincuenta días que se celebraron las elecciones generales en nuestro país para elegir el mero Parlamento Nacional. Elecciones estas cuyo resultado en líneas generales se asemejan a las previsiones manifestadas en las encuestas que publicaron los medios de comunicación.
En esta ocasión la apuesta de los españoles a diferencia de lo ocurrido en elecciones anteriores, ha estado bastante dividida, no alcanzando ningún partido la mayoría absoluta para formar gobierno.
A la vista de lo ocurrido solo se ven dos posibles soluciones, como son por un lado establecer una coalición de partidos que depare el número necesario de diputados que garantice una legislatura estable. Coalición esta que dados los resultados puede darse en tres supuestos y no solo la que pudiera formar el partido más votado, en este caso el PP con Ciudadanos y otros más afines, ya que también existe la posibilidad de que el PSOE. como segundo partido más votado lo intente con Podemos, Ciudadanos y otros partidos menores.
Existe otra opción como es la posibilidad de llegar a un acuerdo entre los dos partidos con mayor número de representantes como son el PP y el PSOE, formando lo que los poderes económicos piden que se lleve a cabo, como es la gran coalición. Supuesto este poco probable y menos aún deseable para la mayoría de los votantes socialistas, que no aceptan que el Partido Popular siga en el gobierno a cualquier precio, teniendo en cuenta la experiencia de esta última legislatura.
En este aspecto no faltan quienes manifiestan que si esto ha sido posible en Alemania, por qué no hacerlo en España, sin reparar que Alemania no es España, ni la derecha española que el Partido Popular representa, es la derecha alemana de la CDU, ni tampoco se asemeja a la derecha francesa, inglesa o de otros países democráticos de Europa.
Ante este panorama y de no encontrarse una rápida solución todo parece indicar que vamos hacia unas nuevas elecciones generales que pueden cambiar el panorama político actual y con ello dar estabilidad al país, para acometer las reformas necesarias y pendientes de acometerse entre las cuales están la renovación de la Constitución Española, la Ley Electoral, la derogación de la actual Ley Laboral, la reforma de la Ley de Educación, de Sanidad, de Cobertura y Asignación del Desempleo, de Desahucios, de Desigualdad Social y otros iniciativas que la mayoría del país demanda y necesita.
También como solución media pudiera alcanzarse un compromiso a medio plazo entre diversos partidos para llevar a cabo, si no todas, si la mayoría de las actuaciones antes citadas y otras y una vez realizada esta misión disolver el Parlamento y convocar unas nuevas elecciones. Compromiso este posible de alcanzar entre las fuerzas políticas que no quieren que el PP vuelva al gobierno de nuestro país y apuestan por cambiar leyes que han perjudicado a la mayoría de la sociedad española.
Por todo lo expuesto y dado que la mayoría de los españoles no quieren ahora nuevas elecciones, es por lo que los partidos políticos en general y más aún los que tienen mayor representación y responsabilidad, deben hacer lo posible para conseguir que se forme un gobierno cuanto antes y con ello se ponga fin a la incertidumbre actual.
Esperemos que el interés general del país prevalezca sobre otra clase de intereses, pero bueno aquí en España todo es posible, ya veremos qué pasa.
Juan Coronel Martín.