La Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG), organismo dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, ha iniciado el cierre de 13 pozos por ejecución forzosa en el entorno de Doñana. En concreto, en el término municipal de Almonte (Huelva), donde ya se ha supervisado y constatado el cierre de tres sondeos y el inicio de los trabajos para el sellado de otros diez.
Según ha indicado la entidad en una nota de prensa, estas tareas, que comenzaron el 9 de agosto y se extenderán durante las próximas dos semanas, se están desarrollando de forma voluntaria por los titulares, y en colaboración con la Comunidad de Regantes El Condado, que actúa como intermediaria en el marco de cooperación entre el Organismo de cuenca y el propio sector para la reversión y conservación del entorno de Doñana.
En este sentido, la CHG ha explicado que el cierre de estos pozos supone el cumplimiento a la resolución de ejecución forzosa emitida el pasado mes de junio por la Presidencia de la Confederación en varios procedimientos en la demarcación.
En concreto, en el término municipal de Almonte (Huelva), donde ya se ha supervisado y constatado el cierre de tres sondeos y el inicio de los trabajos para el sellado de otros diez.
En concreto, estos sondeos se enmarcan en un cierre material de hasta 33 captaciones, en su mayoría relacionadas con comuneros de la Comunidad de Regantes el Condado de Huelva, entidad con la que se ha planteado que sean estos regantes los que, con sus propios medios y de forma voluntaria, ejecuten el cierre con la supervisión y constatación del Organismo de cuenca. Con este criterio se planificó el cierre de 13 sondeos en agosto y el resto en semanas posteriores.
Además, la entidad ha precisado que en la actualidad tiene abiertos procedimientos de ejecución subsidiaria para el cierre de un total de 407 pozos, sondeos que «han sido sancionados, que cuentan con resolución firme y cuyos titulares tienen la obligación de cerrarlos». La previsión del organismo de cuenca es de inutilizarlos antes de finalizar el año.
Para entonces serán 1.065 los pozos cerrados desde 2019: 450 por sustitución de agua subterránea por agua superficial, tras la concesión definitiva a la Comunidad de Regantes El Fresno; y otros 615 por ejecución subsidiaria (en algunos casos de forma voluntaria por los regantes), de los que ya se han cerrado 208.
Incremento de la inspección y control por la sequía
El cierre de pozos supone una intervención «fundamental», según ha indicado desde el organismo, «más aún en el contexto de sequía que atraviesa la cuenca, lo que permitirá aumentar la gobernanza e impedir agravios comparativos entre agricultores».
En este sentido, el pasado mes de julio, el organismo de cuenca adoptó medidas provisionales de precintado de 25 captaciones en Huelva –en el entorno de Doñana–, y de siete en Sevilla –en la Vega del Guadalquivir–, habiéndose actuado ya sobre 17 de estos pozos. Las intervenciones se efectuaron en colaboración con el Seprona de la Guardia Civil.
Estos sondeos se enmarcan en un cierre material de hasta 33 captaciones
Estas medidas cautelares se llevan a cabo para proteger los recursos hídricos y garantizar los intereses generales, al amparo de lo establecido en el artículo 56 de la LPACAP y del Real Decreto-ley 4/2023, de 11 de mayo, por el que se adoptan medidas urgentes en materia agraria y de aguas para paliar los efectos de la sequía.
Las actuaciones consisten en el requerimiento a la propiedad de la extracción de los equipos de bombeo instalados en las captaciones para proceder seguidamente a su precintado.
Por otra parte, se han precintado tomas que tomaban agua de forma irregular en varias zonas de la cuenca. En el caso de Jaén, cuatro que tomaban incumpliendo el caudal ecológico. Con el mismo criterio, tres en Sevilla. En el caso de Córdoba, sin control volumétrico y tomando agua a través de by-pass de la principal. Por último, en Granada, en el marco de un plan de inspección específico de proliferación del cultivo del almendro y pistacho de riego.
A estas actuaciones hay que sumar los planes específicos de inspección centrados en el control volumétrico de tomas del Sistema de Regulación General y ríos no regulados.
Igualmente se han realizado ejecuciones forzosas en todas las provincias; la última en Sevilla (Aznalcázar), donde se han ejecutado de forma subsidiaria obras de eliminación de tuberías ocultas de derivación de aguas de gran diámetro.