Conocerán las últimas novedades del proyecto de “Modernización y consolidación de los regadíos del Condado”, necesario para la llegada de agua de superficie a esta zona de la provincia de Huelva, y estudiarán las acciones a emprender ante la demora en su tramitación.
Más de 1.000 agricultores se darán cita el jueves día 12 de julio en Moguer para conocer las novedades en el proyecto de “Modernización y Consolidación de los Regadíos del Condado” y estudiar las acciones a llevar a cabo para exigir su ejecución.
Se trata de un encuentro puesto en marcha por la Plataforma en Defensa de los Regadíos del Condado y tendrá lugar en la sede de la Comunidad de Regantes El Fresno, siendo presentado por el presidente de esta institución, Ángel Gorostidi, y el presidente de Interfresa, Cristóbal Picón. Asimismo, estarán presentes los alcaldes de las localidades de Moguer, Lucena del Puerto, Bonares y Rociana del Condado, Gustavo Cuéllar, Manuel Mora, Juan Antonio García y Amaro Huelva, respectivamente; los representantes de las entidades del sector que constituyen la Plataforma (COAG, Asaja, UPA, Faeca y Freshuelva, aparte de la ya mencionada Interfresa); y los presidentes y gerentes de las cooperativas del Condado.
Retraso en el proyecto. La plataforma pide la puesta en marcha del proyecto de “Modernización y consolidación de los regadíos del Condado”, que traerá el agua superficial a la zona y que se encuentra a la espera de recibir la Declaración de Evaluación Ambiental por parte del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente. Para ello, la plataforma ha solicitado un encuentro con el ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete.
Gorostidi ha recordado que el sector agrícola del Condado, en el que se involucran 1.500 agricultores, “lleva más de 30 años intentando solventar la escasez de agua y no puede admitir más demora porque tiene el agua en la puerta, sólo hay que iniciar las obras”. En este sentido, ha recordado que estos trabajos supondrán una inversión de 17 millones de euros (aportados en un 30% por los agricultores y en un 70% por fondos europeos) y crearán 700 puestos de trabajo durante sus 24 meses de duración. Asimismo, supondrán el cierre de aproximadamente 900 pozos de la zona, con el correspondiente alivio que conllevará para el acuífero 27, principal recurso hídrico del que se nutre el Parque Nacional de Doñana. “Lo vamos a hacer de verdad, este compromiso de cierre es la mejor declaración ambiental”.