Los alcaldes de los municipios de la Corona Norte de Doñana han pedido este martes una solución de consenso entre la Junta de Andalucía y el Gobierno central para dar respuesta al problema con el que se encuentran muchos de sus agricultores para regar sus cultivos, dejando de lado la contienda política y electoral.
En la tramitación parlamentaria de la proposición de ley que impulsan PP y Vox para regular los suelos de regadío en el entorno de Doñana han comparecido los alcaldes de los municipios afectados, que son Almonte, Moguer, Rociana del Condado, Bonares y Lucena del Puerto, ninguno de ellos gobernados por alguno de esos dos partidos.
La alcaldesa de Almonte, Rocío del Mar Castellano, de Mesa de Convergencia, ha sido la más crítica con la iniciativa parlamentaria, que cree que pretende evitar la participación pública y que es «insostenible» porque no hay agua superficial para regar las nuevas tierras.
Ha tildado de «absolutamente electoralista» la propuesta, que ha «roto el consenso» y va a «empeorar la situación del acuífero» de Doñana, por lo que ha reclamado su retirada y ha pedido que todas las administraciones trabajen por un «objetivo común».
El alcalde de Moguer, el socialista Gustavo Cuéllar, considera que el plan de ordenación de la Corona Norte y el plan de ordenación del territorio tienen las suficientes herramientas para trabajar sobre esta materia.
Cuéllar ve «preocupante» la imagen que se está dando en términos políticos y del sector, utilizando como «arma arrojadiza» Doñana, la agricultura o el riego, aunque sería «muchísimo más fácil» si todos se reunieran, pero sobre todo las administraciones implicadas, ha defendido.
El regidor de Rociana, Diego Pichardo, del PSOE, ha expuesto que después de más de treinta años «ya toca» que las administraciones «se sienten en una mesa» para encontrar una solución «fiable y verdadera».
Ha señalado que «el agua no tiene color», que se dejen las «peleas en la prensa» y que los partidos abandonen la competición por conseguir «la medalla más grande», ya que los agricultores están «cansados» y solo quieren una solución.
Por su parte, el socialista Juan Antonio García, alcalde de Bonares, considera que esta iniciativa «carece de consenso» y busca una solución fácil para un problema muy complejo, por lo que ha reclamado diálogo entre las administraciones «de distinto signo» con una comisión bilateral.
Ha manifestado que «se le ha dado una patada al avispero» y que se está dando «una imagen de vergüenza» sobre los cultivos de fresas.
«Sí rotundo a esta ley», señala el alcalde de Lucena
El alcalde de Lucena del Puerto, Manuel Mora (Independientes), se ha mostrado partidario «del sí rotundo» a la proposición de ley, porque «no toca el acuífero y no supone modificación sustancial del plan».
Ha señalado que las parcelas que se dicen que son nuevas se repartieron en 1938, «y desde entonces permanecen en cultivo», aunque la aplicación del plan de 2014 las dejara fuera.