En 1930 D. Ildefonso Prieto Carrasco, D. Andrés Prieto Carrasco, D. José Carrasco y Carrasco y el Párroco D. Antonio del Brío García, aportaron una cantidad económica para una biblioteca escolar que se iba a instalar en una escuela nacional del pueblo onubense de Santa Olalla del Cala.
También en ese año, la Dirección General de Sanidad sacó a concurso la plaza de veterinarios titulares e inspectores municipales, para Bonares.
El Sr. Alcalde D. Cristóbal Guzmán Pérez, en 1931 y en cumplimiento de la ley, requirió a los mozos para que hicieran efectivo el pago de las cédulas, negándose aquellos a efectuar el pago de los recargos. El ambiente se volvió crispado y la Guardia Civil indició que si fuera necesario, solicitaba refuerzos de Caballería.
- Bonares Digital-Colaboración Raúl Delgado